POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 165

Irán, el acuerdo y la geopolítica de Oriente Próximo

Si Irán continúa con su programa nuclear será inevitable una carrera armamentística en Oriente Próximo. El acuerdo de Lausana es la única vía para evitar ese escenario y llegar a junio con verdaderas posibilidades de abrir una nueva etapa en la política regional.
Jorge Dezcallar
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Irán es un gran país. Tres veces el tamaño de España, tiene una población de 80 millones de habitantes, un PIB de 370.000 millones de dólares y una historia que se hunde en la noche de los tiempos. Ha sido una potencia regional desde los aqueménidas, hasta que la revolución de Jomeini en 1979 y la instauración de la República Islámica, con su retórica antisemita y la ruptura de relaciones con Estados Unidos, la condenaron al ostracismo. Durante la sangrienta guerra Irán-Irak (1980-88) el mundo apoyó a Sadam Husein, y EE UU y Francia llegaron a vetar en las Naciones Unidas una investigación sobre el uso de armas químicas por parte de Bagdad. En el hospital Gómez Ulla de Madrid recibimos a algunos de aquellos heridos con terribles quemaduras. “Nunca más”, debieron decir los dirigentes iraníes, que comenzaron sus investigaciones nucleares allá por 1985.

Cuando en 2002 el mundo descubrió que Irán tenía en Natanz un programa de enriquecimiento de uranio y una planta de agua pesada en Arak saltaron todas las alarmas. Aquello no solo significaba una ruptura de sus obligaciones en el marco del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), sino una amenaza existencial para Israel (que no ha ratificado el tratado) y el anuncio de una carrera de armamento nuclear en Oriente Próximo. Era imperativo detener a Irán y la comunidad internacional le impuso unas sanciones (políticas, militares, económicas, bancarias y financieras…) que unidas al actual descenso del precio del petróleo han asfixiado el país, como reconoce el 93 por cien de los iraníes, según una encuesta de la universidad de Teherán citada en Foreign Affairs. Esta asfixia política y económica, unida a la mano tendida de Barack Obama en el discurso de toma de posesión de la presidencia en 2009, crearon una ventana de oportunidad que…

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