POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 120

Un legado de cenizas, medio siglo de desarrollo

Luis Martí
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¿Están subdesarrollados los países porque son pobres o es la pobreza consecuencia del subdesarrollo? ¿Explica la debilidad institucional el subdesarrollo o hay que esperar que el desarrollo genere las instituciones apropiadas? Este debate debería inspirar la política de desarrollo.

El subdesarrollo y las formas de superarlo ejercieron enorme atractivo sobre el pensamiento de la época, y produjeron enfoques extraordinariamente heterogéneos. En un principio, fue común la convicción de que el sector público debía desempeñar un papel decisivo en el proceso de levantar a un país del atraso y la pobreza. La política económica en India se basó, por ejemplo, y hasta época bien reciente, en una cadena de planes quinquenales que sirvió como referencia y modelo de planificación de Estado para muchos países recién independizados.

En América Latina, estructuralismo y teorías de la dependencia dieron cobertura intelectual a una evolución dirigista de la economía, que legitimaba abiertamente políticas de sustitución de importaciones como instrumento de la industrialización. Para los estructuralistas, la economía capitalista exigía un fuerte intervencionismo estatal; los teóricos de la dependencia defendieron un modelo socialista, rechazando toda posibilidad de que el desarrollo pudiera nacer del capitalismo. Y finalmente, habría que anotar un conjunto disperso de interesantes aportaciones a la economía del desarrollo por una serie de autores casi olvidados –Rosenstein-Rodan, Nurkse, Hirschman…– que no se tradujeron en modelos coherentes de política económica. Su visión del subdesarrollo y del papel del sector público fue sin embargo realista. Paul Krugman y otros han recuperado la buena economía que subyacía a sus propuestas.

El crecimiento en economías avanzadas ha ocupado siempre un lugar en la historia de la teoría económica. A partir de Harrod, Domar, más tarde Solow, el debate académico provocó reelaboraciones de gran profundidad teórica, aunque de escasa relevancia para los problemas específicos del desarrollo. Muchos economistas del desarrollo…

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