La Unión Europea en las Relaciones Internacionales

Esther Barbé, coordinadora de programa de investigación del IBEI y catedrática de Relaciones Internacionales en la UAB, dirige La Unión Europea en las Relaciones Internacionales –donde han participado 21 especialistas, desde Oriol Costa, Pol Morillas, Laia Mestres o Eduard Soler i Lecha hasta José Antonio Sanahuja, entres otros–, proyecto enfocado al mundo académico, pero que también puede ser de gran utilidad para aquellos interesados en informarse y reflexionar sobre un asunto imprescindible en las relaciones internacionales del mundo actual: la Unión Europea como actor-potencia en proceso de formación, su papel en un mundo internacional en cambio y la viabilidad del proyecto europeo.

El libro se divide en tres bloques: “Instituciones, procesos e instrumentos”, “Cartografía de las relaciones exteriores” y “Actor en la gobernanza global”. En la primera parte se analizan factores endógenos y exógenos que dificultan la normalización de la UE como actor de la sociedad internacional, entre los que encontramos unas instituciones demasiado complejas, lagunas, incompatibilidades y solapamientos, pero también un sistema que está diseñado por y para los Estados y dificulta la acción de la UE. En una dinámica paradójica, tenemos Estados miembros reacios a ceder soberanía pero capaces de reforzar el poder de las instituciones europeas a través del tratado de Lisboa. Los autores señalan que la Unión cuenta con múltiples instrumentos de acción, pero que no siempre se utilizan de forma eficiente.

La segunda parte profundizan en cuestiones como la integración de miembros, una de las constantes en la UE, y sus relaciones en términos geográficos. Aquí encontramos reflexiones interesantes sobre la política de la UE con sus vecinos, enfocada a que se adapten al sistema de valores europeos. También con los países en desarrollo, con los que han primado intereses comerciales y estratégicos –al modo de las potencias clásicas–, y  con los que desplaza su modelo desarrollista hacia uno más liberal. No pueden faltar las relaciones con socios estratégicos, desde su aliado más tradicional, Estados Unidos, hasta Rusia y China, con los que aún queda mucho trabajo para hacer.

El último bloque es quizá el más atractivo, pues sitúa a la Unión en la sociedad internacional como un actor más y analiza su desempeño. Los autores investigan sobre la imagen que tiene la UE, la distorsión entre lo que quiere vender y lo realmente vende; en qué posición ha quedado tras la crisis del euro y en qué aspectos tiene más o menos peso: política ambiental, energética, de no proliferación, promoción de los derechos humanos, etcétera.

La Unión Europea en las Relaciones Internacionales es una exhaustiva recopilación de debates teóricos y empíricos, contraposición de ideas y trabajo en grupo. Plantea los retos de un actor diferente que promueve el desarrollo de otros grupos regionales, que promociona el multilateralismo y que se desenvuelve bien con  otros actores no tradicionales como ONG y empresas. Para hacerse un hueco en la competitiva sociedad internacional este actor tendrá que superar tensiones internas, pero también convencer a los demás de su credibilidad, estrechando la distancia entre su  discurso y la práctica, adaptándose a una realidad en cambio. Como señala Daniel C. Thomas, una voz única “es necesaria para ejercer influencia a nivel internacional, pero ya no es suficiente en un mundo donde los otros no comparten las preferencias de la UE y están dispuestos a movilizar recursos para conseguir sus objetivos”.

Por Alejandra Hidalgo, interncionalista.