POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 177

François Hollande y Angela Merkel en el Consejo de la UE (Bruselas, 7 de marzo de 2016). UE

El tándem franco-alemán en una Europa en crisis

Sin un vínculo sólido Alemania-Francia, la UE pierde impulso. Las crecientes asimetrías entre los dos países, en tamaño económico y cultura política, explican sus divergencias en la manera de entender Europa. El interés de la relación reside, sin embargo, en estas diferencias.
Claire Demesmay
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Con la multiplicación de las crisis en Europa, la cooperación franco-alemana y su capacidad para ofrecer soluciones a los problemas de la Unión Europea se plantea con una nueva intensidad. Por primera vez desde hace décadas, el riesgo de desintegración de la UE con el Brexit se vuelve real. Y la norma europea según la cual cada crisis desemboca en un nuevo avance en la integración parece estar hoy cuestionada. No cabe duda de que París y Berlín mantienen una relación sólida y cordial, aunque no siempre exenta de tensiones, y colaboran estrechamente en la mayoría de las cuestiones europeas. Cuando se trata de defender valores superiores como la paz y la seguridad en Europa, las divisiones no parecen afectarles, como ponen de manifiesto las reacciones de los dirigentes alemanes ante los atentados en Francia y el liderazgo franco-alemán en la gestión de la crisis en Ucrania. Pero ¿basta esta relación para sacar a la UE de su situación de crisis permanente? Y, sobre todo, ¿sabrán los franceses y los alemanes hacer de la necesidad virtud y, ante el riesgo de desintegración, encontrarán la energía necesaria para un proyecto de futuro ambicioso para Europa?

Detrás del mito de una colaboración armoniosa

En un periodo de múltiples desestabilizaciones como el actual, resulta tentador caer en la nostalgia de una época dorada europea impulsada por la amistad franco-alemana. Se nombra a menudo a Helmut Schmidt y Valéry Giscard d’Estaing, quienes, tras la crisis petrolera de 1973, crearon el Sistema Monetario Europeo; o también a Helmut Kohl y François Mitterrand quienes, en respuesta a la caída del muro de Berlín y a la incertidumbre que provocó, propusieron a sus socios una conferencia intergubernamental sobre la unión económica y monetaria y la unión política, que dio lugar al Tratado de Maastricht en 1992.

En…

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