POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 2

La conquista de los mercados exteriores

José Ferrer Sala
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La vocación de expansión de una empresa, su afán de crecimiento, es el impulso que la conduce hacia los mercados exteriores. En el caso de la empresa que presido, esta vocación nos viene de antiguo, ya que sus fundadores tuvieron desde el primer momento la voluntad no sólo de exportar, sino también de establecerse en el extranjero, como de hecho hicieron en los primeros años treinta. La guerra de España y la Segunda Guerra Mundial malograron el fruto de aquellos `esfuerzos. Por nuestra parte, reemprendimos los viajes a algunos países de Europa en 1945, en un momento poco alentador, cuando aún humeaban las ruinas de los bombardeos; estábamos, sin embargo, seguros de que llegarían mejores tiempos.

Hizo falta mucha tenacidad y, sobre todo, una gran fe en el producto y en sus posibilidades, para intentar la conquista de aquellos mercados. Mis colegas de San Sadurní, entonces e incluso muchos años después, en los setenta, me decían que lo que sucedía en realidad era que a mí me gustaba viajar, porque un producto como el nuestro no tenía ninguna oportunidad de ser exportado y quedaría para siempre limitado al consumo interior. Esto mismo fue lo que se nos repitió cuando intentábamos penetrar en el mercado americano. Actualmente, las exportaciones a Estados Unidos han adquirido una gran importancia (cerca de 12 millones de botellas al año solamente de la marca Freixenet); se ha experimentado un crecimiento extraordinario y el vino de cava ahora es un producto de prestigio a nivel mundial.

 

Gran Bretaña

Debo decir, que el pesimismo de mis colegas no era infundado en absoluto: nuestro producto despertaba un total rechazo en gran parte del merca- do europeo. En aquellos años, en Inglaterra, por ejemplo, resultaba imposible encontrar un distribuidor dispuesto a vender nuestro espumoso. Cuando lo probaban, les…

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