INFORME SEMANAL DE POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 1213

Somalia: Incertidumbre en grado máximo

La crisis económica, tensiones entre el gobierno central y los Estados federados, injerencias extranjeras y la retirada de las misiones de pacificación internacionales esbozan un futuro inquietante para el país.

Somalia lleva emitiendo señales inquietantes al menos desde 1991, cuando la caída del presidente Mohamed Siad Barre provocó una crisis violenta de la que realmente nunca ha salido, mientras se deteriora inexorablemente su nivel de bienestar y se agravan sus problemas políticos. A pesar del intento iniciado en 2012 por corregir el rumbo, con una nueva Constitución provisional y una mayor implicación internacional para consolidar la democracia, nada indica que hoy se haya logrado hacerla irreversible. Por el contrario, se acumulan serias dudas sobre su futuro inmediato, comenzando por la posibilidad de que no lleguen a celebrarse las elecciones legislativas que deben dar paso a la designación de un presidente federal el 8 de febrero.

El deterioro del escaso nivel de bienestar de la población continúa y los datos económicos dejan poco lugar a la esperanza. El Informe Doing Business 2020 del Banco Mundial identifica Somalia como el peor país del mundo para invertir. Su Índice de Desarrollo Humano y su renta per cápita (por debajo de los 300 euros anuales) lo sitúan a la cola mundial. Eso explica en buena medida el descontento de los 15 millones de somalíes con unas autoridades que no han conseguido revertir una dinámica…

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