INFORME SEMANAL DE POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 1344

Algo se mueve en Venezuela

El alivio por Washington de algunas de las 980 sanciones que impuso Donald Trump a Venezuela –permitiéndole exportar hidrocarburos, oro y negociar su deuda soberana en el mercado secundario hasta abril de 2024–, a cambio de que el régimen garantice unas elecciones libres en 2024, ha abierto un estrecho resquicio a una eventual salida a la larga crisis política del país. Todo va a depender de que el chavismo acepte la candidatura presidencial de María Corina Machado, algo que no es seguro.

Las concesiones de Estados Unidos, tras un año de negociaciones secretas, podrían considerarse una recompensa por los acuerdos que alcanzaron en Barbados el 17 de octubre el régimen de Nicolás Maduro y la oposición para realizar elecciones competitivas en 2024. Caracas se comprometió, entre otras cosas, a permitir que los partidos elijan a sus candidatos, la supervisión internacional de los comicios, auditorías al proceso y la actualización del registro electoral.

Pero solo es el primer paso de un largo –y tortuoso– proceso que algunos ven como una luz al final del túnel y otros como una trampa. En principio, a Washington le interesa recuperar la producción petrolera venezolana, al chavismo las inversiones extranjeras en el sector y a la oposición unas elecciones libres.

En los próximos seis meses, Venezuela va a poder exportar gas, petróleo y oro sin restricciones, con lo que podría duplicar sus ingresos en 2024, hasta los…

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