INFORME SEMANAL DE POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 1279

Caribe: Cuba después de Los Ángeles

Nadie espera que los tiempos del deshielo con Obama regresen, pero Biden ha terminado por admitir que no puede desentenderse de la mayor de las Antillas. En muchos campos, sin embargo, la pelota está en el tejado de La Habana, que malogra una tímida apertura económica con una vuelta de tuerca a la represión.

El nuevo Código Penal aprobado el 15 de mayo por la Asamblea Nacional cubana criminaliza, entre otras, las libertades de expresión, de asociación y de reunión. Este hecho ha reducido las posibilidades de que el leve deshielo iniciado por Joe Biden con La Habana vaya más allá de la retirada de algunas de las sanciones más duras que impuso Donald Trump a la isla. La más importante era el límite de la cuantía de las remesas a 1.000 dólares por trimestre. El 17 de mayo, el departamento de Estado retiró dicho limite. Antes de que Trump los bloquease, los envíos de la diáspora cubana a sus familias sumaban unos 3.500 millones de dólares anuales.

Por otra parte, la reanudación de los vuelos comerciales a distintas ciudades de la isla, y no solo a La Habana, ayudarán a reactivar el turismo. En 2020, la caída simultánea de las remesas y de los…

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