a cercanía geográfica y la historia compartida no siempre proporcionan el buen entendimiento entre países. Gran parte de los problemas entre Marruecos y España se superarían si ambos fuesen capaces de fortalecer el tejido económico que los acerca y que debería unirlos.
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La paz desde las regiones, el reto del posconflicto
Enseñanza del árabe en España