POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 219

Aprender de revoluciones pasadas

Este libro es una guía en tiempos de incertidumbre y veloces cambios, que demuestra que hasta las revoluciones más exitosas han generado resistencia.
Gaspar Atienza
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En su nuevo libro, Fareed Zakaria nos deleita con una historia sobre las grandes revoluciones desde el año 1600 hasta nuestra época, que nos puede servir de guía en los tiempos de acelerada transformación que vivimos. Como dice el autor, se trata de una historia sobre acciones y reacciones, de progresos y retrocesos a lo largo de los años como consecuencia de los diferentes procesos revolucionarios. Hasta las revoluciones que mayor éxito han tenido, sostiene Zakaria, han generado resistencia. Y todo ello desde un talante liberal contra populista, entendiendo como liberal a aquél que “quiere expandir la libertad y defender el Estado de Derecho”.


Age of Revolutions: Progress and Backlash from 1600 to the Present
Fareed Zakaria
W.W. Norton & Company, NY, 2024
400 págs.


El libro –plagado de fabulosas citas y producto de un maestro de la geopolítica y la divulgación– comienza con la primera revolución de la globalización en los Países Bajos en el siglo XVII, cuando los holandeses supieron adaptarse mucho mejor que los portugueses y los españoles a una nueva era y a la revolución tecnológica del momento. La clave es la adaptación, argumenta Zakaria, no la fuerza o el tamaño de un país al comienzo de dicha nueva era. Pero incluso esta primera revolución liberal tuvo su reacción contraria en otros países europeos, especialmente en Francia donde la monarquía absoluta oprimió a disidentes y religiones minoritarias.

Tras analizar la revolución gloriosa de Inglaterra (1688), la francesa (1789, la “fallidasegún el autor) y las revoluciones europeas de 1848, Zakaria otorga absoluta preminencia a la revolución industrial inglesa (decía Eric Hobsbawn, citado por el propio Zakaria, “probablemente el evento más importante en la historia del mundo”) hasta luego centrarse en la verdadera revolución americana, también la industrial de los siglos XIX y XX. Y cuando trata de Estados Unidos el autor menciona diversos momentos históricos de populismo, incluyendo la ola más reciente, y cómo los debates ideológicos se han centrado tanto en la lucha de izquierda vs. derecha, como entre sociedad cerrada y sociedad abierta (en lo social, político y económico).

Zakaria argumenta que no podremos asimilar el proceso de reorganización mundial que vivimos hoy sin antes entender las consecuencias de las actuales revoluciones en globalización, tecnología de la información e identidad. Y a ello dedica la segunda parte de este fenomenal ensayo. La primera ya tuvo sus detractores y su retroceso con las guerras comerciales de finales del siglo XIX y el inicio de la Primera Guerra Mundial, para posteriormente continuar con más fuerza hasta llegar a la apoteosis de la democracia liberal y el capitalismo global, en la década de los noventa. Las recientes reacciones contrarias de Vladímir Putin en Rusia, Narenda Modri en India, Viktor Orban en Hungría, Jair Bolsonaro en Brasil o Jaroslaw Kaczynski en Polonia, sostiene Zakaria, tienen su origen en aquella época de hiper globalización.

Y la revolución digital y tecnológica que estamos viviendo, en su opinión, tiene sus propias contraindicaciones, pues no sólo ha agudizado la soledad del individuo, sino también otorgado poder a quienes la explotan, como ya decía Hanna Arendt.

Pero ante este abismo que se abre, la historia de las revoluciones nos enseña, entre otros aspectos, que cualquier proceso que ha transformado una sociedad tanto y a tanta velocidad, ha sido siempre tremendamente disruptiva. Y que la ansiedad que un proceso así provoca en el individuo, en su identidad y en su sensación de pertenencia a una comunidad, es la que nutre el populismo, nacionalismo y autoritarismo que con tanto peligro arrecian por todo el mundo.

¿Y qué podemos hacer ante todo ello? pregunta Zakaria. Aquí el autor cierra filas contra los extremistas y, como buen liberal (en la definición ya referida), cita a Isaiah Berlin cuando criticaba a quienes decían tener la respuesta a todo y se impacientaban por la relevancia que el liberalismo otorgaba a las reglas, los procesos y el valor del compromiso. Este libro de Zakaria permitirá al lector entender mejor el mundo de hoy gracias al análisis de las revoluciones del ayer y, lo que es mejor, quitarle la ansiedad que produce vivir en una época de incertidumbre.