Autor: Ramón Casilda Béjar
Editorial: Tirant lo Blanch
Fecha: 2019
Páginas: 532
Lugar: Valencia

El capitalismo fácil e interactivo

Irene Fernández Jiménez
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Capitalismo. Crisis y reinvención de Ramón Casilda Béjar es un libro sorprendente. Dentro de la materia económica, el autor es capaz de escapar de los manuales clásicos y tediosos para concebir una obra sencilla a la vez que completa. El formato y el lenguaje utilizados abstraen de la idea de las teorías complejas y son capaces de explicar, de manera divulgativa, la historia secular del capitalismo. Evitando las clásicas críticas al sistema económico internacional actual, Casilda Béjar ofrece una alternativa: transformar el capitalismo, pero no destruirlo.

Aludiendo a lo anterior, en un principio se presenta la crisis de confianza de la sociedad en las instituciones creadas en los últimos 100 años, gobiernos, estados, bancos, partidos políticos, organizaciones internacionales, entre otras muchas. Se acusa estos órganos de permanecer pasivos ante las crisis económicas y ante sus consecuencias. Los Nuevos Enfoques ante los Desafíos Económicos (NAEC) están originando reflexiones como el crecimiento incluyente o la transformación de las escuelas de negocios dado el papel primordial que juegan en la economía. El autor defiende que la conducta empresarial debe ser responsable, teniendo en cuenta la economía verde o la lucha contra la corrupción, por ejemplo. Esto se resume en la idea de “ser exitosos haciendo el bien”.

Volviendo a la estructura del libro, el dinamismo y coherencia de los que el autor hace uso la convierten en un índice descriptivo sobre el que el lector puede apoyarse durante toda la lectura. La historia del capitalismo, con sus etapas (comercial o naciente, de expansión industrial, financiera tecnológica y científico-tecnológico), se completa con una terminología nueva, acuñada por Casilda Béjar, el “capitalismo global interactivo”. La actualidad del término se lo dan las cuatro fuerzas que lo componen: la globalización, las multinacionales, las tecnologías de la información y la comunicación y el conocimiento.

Previamente, realiza un repaso económico, institucional, financiero, geopolítico, intelectual y teórico del capitalismo, para poner en situación al lector. Destaca aquí la idea de las crisis, su inherente relación con el capitalismo y la incapacidad probada de poder evitarlas. A lo largo de la historia cada una de ellas ha tenido sus características propias. No hay dos crisis iguales. Así lo recoge el autor en “Las crisis son especies en evolución”.

Un apunte importante que hace Casilda Béjar en Capitalismo. Crisis y reinvención es sobre el neoliberalismo, que nace en 1930. El primer liberalismo data de principios del siglo XX. En la década de los años 30 se trataba de salvar la economía de mercado, no el liberalismo, propiamente dicho (que se daba por perdido). Otra de las curiosidades que hace de este libro una lectura amena es la inclusión de un pragmático ejemplo sobre la ausencia de pobreza en Star Trek.

La segunda parte del libro, “Reinvención del capitalismo”, se asienta en las cuatro fuerzas propulsoras. Cada una de ellas ofrece una exposición meticulosa de un determinado rasgo del capitalismo.

La primera fuerza, la globalización, tiene diferentes definiciones pero ninguna precisa e integral. Desde organismos especializados, como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), hasta pensadores de la talla de Manuel Castell. Este asunto se aborda desde las tres escuelas: la hiperglobalizadora, la escéptica y la transformacionalista. Asimismo, se ejemplifica a través de las políticas llevadas a cabo por los grandes actores internacionales, como Estados Unidos y su “America first”, con el que intenta combatir la globalización. Ejemplo de ello es su guerra comercial con China y cuestionamiento de la Organización Mundial del Comercio (OMC). China hace frente a la globalización con el libre comercio; con su famosa nueva Ruta de la Seda.

En segundo lugar, la empresa multinacional dispone de varias definiciones pero con un mayor acuerdo. Gilpin las define como “empresas que tienen su sede en el país de origen, pero que operan y funcionan también de acuerdo con las leyes y las costumbres de otros países, como: empresas multinacionales”. Las tres características definitorias son: su base productiva o su inversión directa en otro país; la asunción por la alta dirección de la empresa de la responsabilidad de las operaciones en el extranjero; y que persiguen los mayores beneficios, aún en perjuicio de una parte de la empresa o de una filial. Queda claro que la internacionalización de la empresa multinacional persigue ventajas arancelarias, productivas y económicas a condición de que sea competitiva globalmente.

La tercera fuerza son las tecnologías de la información y la comunicación (TIC). Se abordan desde una perspectiva crítica, aludiendo a que resuelven problemas pero también los causan, previstos e imprevistos. El autor recurre a la desaparición de puestos de trabajo, sobre todo administrativos y de oficina, o a la filtración de datos de las grandes compañías a gobiernos (caso Snowden). Hay que ser conscientes de que la privacidad total en Internet es imposible, pero debería ser una de las principales prioridades. Por otro lado, recuerda que las TIC sirven para democratizar la información, la cultura y la educación. Ofrecen oportunidades para mejorar la calidad de vida. La economía digital se extenderá y facilitará la gobernanza global gracias a estas nuevas tecnologías. Aceleran, igualmente, la Cuarta Revolución Industrial, que posibilitará que personas y máquinas trabajen en un mismo espacio con las herramientas del mundo virtual, Internet.

Por último, el conocimiento se presenta como el conjunto global y transversal, consciente o inconsciente, de técnicas, saber o pensamientos de toda la humanidad.

El libro cierra con la explicación de lo que Casilda Béjar ha denominado el Capitalismo Global Interactivo, y abre un espacio para la crítica a sus propias ideas por parte de los receptores del libro. Nos permite hacerlo nuestro.