POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 205

Una pantalla muestra al presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, hablando durante la XIV Cumbre Empresarial China-LAC en el Centro Internacional de Convenciones de Yuelai el 16 de noviembre de 2021 en Chongqing, China. GETTY

La levedad de España y la UE en Latinoamérica

Desde hace una década, la Unión Europea y España pierden influencia en América Latina, cuyos males estructurales se han agravado con la pandemia. Es urgente repensar la alianza.
Ramón Jáuregui
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Parafraseando a Milan Kundera, Europa y España mantienen una preocupante “levedad política” en América Latina desde hace más de una década. Coincide esta pérdida de peso e influencia con el agravamiento de todos los males estructurales que sufre la región a raíz del Covid-19. Dicho de manera simplificada, América Latina está muy mal y ­nosotros no estamos. Quizá sea una frase demasiado injusta: con nuestra cooperación, con el volumen de nuestra presencia económica y con el entramado institucional que mantenemos en y con América Latina. Pero es provocadora de una reflexión que necesitamos hacer y de una reacción que los entramados sociales y políticos españoles y europeos han de tener con urgencia.

No repetiré el diagnóstico pesimista de la América Latina actual. Es demasiado conocido y genera un peligroso desinterés en círculos económicos y en determinadas cancillerías europeas. Diré solo que el estancamiento económico de estos últimos años y los daños de la pandemia amenazan la recuperación futura; que la región está más desunida y fracturada que nunca; y que la democracia, asentada en todos los países a finales del siglo XX, hoy sufre una peligrosa crisis de credibilidad social, acompañada de una alarmante aparición de populismos de distinto signo en un contexto de polarización ideológica extrema. Diversos conflictos nacionales diferentes y enquistados representan bien este panorama descriptivo. La inestabilidad institucional de otros muchos lo certifica.

La pregunta es si la presencia e influencia españolas están al nivel de los intereses que representamos y si nuestra acción exterior en la región corresponde al papel que históricamente hemos ejercido en América Latina. Por recordar solo el pasado más reciente, España fue clave en los Acuerdos de Paz de la región centroamericana en Esquipulas en 1985. Fue España quien abrió la puerta de Europa a la región promoviendo la organización de la…

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