POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 201

Vista aérea del glaciar AJAX y la roca O'Connor en las inmediaciones de la estación Comandante Ferraz, el 8 de enero de 2020 en la isla King George, Antártida. ALESSANDRO DAHAN/GETTY

¿Quién debe decidir el futuro de la Antártida?

La geopolítica nunca ha abandonado al continente blanco. Para evitar cualquier conflicto sobre sus recursos, habrá que volver a la cuestión de su estatus territorial.
Yelena Yermakova
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Cuando todos los recursos del mundo se hayan agotado, la Antártida será una cueva de los tesoros de materias primas”, afirma un estudio del Instituto de Investigación Polar de China (PRIC, por sus siglas en inglés). El cambio climático y los avances tecnológicos auguran la futura prospección y explotación de las reservas minerales de la Antártida. La prohibición de la extracción minera en la zona, establecida por el Protocolo del Tratado Antártico sobre la Protección del Medio Ambiente de 1991 (en adelante, el Protocolo), en vigor desde 1998, podría ser revisada en 2048. Los investigadores del PRIC calculan que el continente helado contiene 500.000 millones de toneladas de petróleo y entre 300.000 y 500.000 toneladas de gas natural.

Ante la creciente presión para realizar la transición de ambas fuentes de energía debido a la alteración del clima, lo más probable es que el centro de los debates sobre los derechos de los recursos de la Antártida esté en los minerales preciosos. La demanda de minerales antárticos dependerá de su disponibilidad en otros lugares, del futuro de la demanda de metales y de la tecnología de reciclaje. En las actuales condiciones, los costes de explotación no justificarían los beneficios económicos de una posible extracción, aunque se autorizase la actividad minera. No obstante, esto podría cambiar en el futuro. El platino es el mineral que más probablemente se extraerá de la Antártida en años venideros. El mineral es considerado un elemento crucial en el desarrollo sostenible, ya que resulta esencial para la tecnología de la próxima generación de baterías, pero la demanda global ha aumentado más deprisa que la oferta.

 

«El Sistema del Tratado Antártico se basó en el principio de ‘acuerdo en el desacuerdo’, pero fue capaz de aplazar el debate sobre la soberanía»

 

El interés por los recursos…

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