Holbrooke, gigante de la política exterior americana

 |  15 de diciembre de 2010

Richard Holbrooke, el arquitecto de la paz en los Balcanes y enviado de Barack Obama en Afganistán y Pakistán, será recordado en palabras del presidente de Estados Unidos como un «verdadero gigante de la política exterior estadounidense que ha hecho de Estados Unidos un país más fuerte, más seguro y más respetado.» Con un estilo directo y persistente, Holbrooke era conocido como el «bulldozer» de la diplomacia de Estados Unidos.

Durante su carrera diplomática, que empezó en Vietnam en 1962, trabajó con los cuatro presidentes demócratas (John Kennedy, Jimmy Carter, Bill Clinton y Barack Obama). Autor de uno de los volúmenes secretos que formaban los llamados «papeles del Pentágono» filtrados en 1971, desempeñó, entre otros, los cargos de director de los Cuerpos de Paz en Marruecos (1970-1972), subsecretario de Estado encargado de la política hacia Asia Oriental y el Pacífico (1977-1981), con sólo 35 años, y embajador en Alemania (1993-1994).

En agosto de 1995 encabezó la delegación estadounidense en las negociaciones para la paz en los Balcanes. Consiguió que los presidentes de Franjo Tudjman (Croacia), Slobodan Milosevic (Serbia) y Alija Izetbegović (Bosnia) pusieran fin a casi cuatro años de conflicto, con la firma de los Acuerdos de paz de Dayton, de los que estos días se cumplen 15 años y que él se encargó de relatar de forma detallada en su libro Para acabar una guerra (Política Exterior, Biblioteca Nueva, Madrid 1999).

Como mediador en Afganistán y Pakistán, su estilo tajante le valió pocos amigos, incluidos los propios militares estadounidenses. Sin embargo, logró un conocimiento especialmente profundo de la región y desarrolló vínculos directos con los líderes de Afganistán y Pakistán. La muerte de Holbrooke se produce justo cuando la Administración Obama tiene previsto explicar los progresos realizados en Afganistán dentro de los planes para empezar a retirar fuerzas del Pentágono este verano y terminar para 2014 con todas las operaciones de combate.

Por sus labores de mediación, había sido candidato en siete ocasiones al Premio Nobel de la Paz.

Para más información:

Ahmed Rashid, «Pakistán, al límite», Política Exterior 130, julio/agosto 2009
Norman Birnbaum, «¿Una nueva política exterior en Estados Unidos?», Política Exterior 128, marzo/abril 2009
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