POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 30

Memorias de África

Análisis de las políticas que llevan a cabo tanto Estados Unidos como Europa hacia África, tras el fin de la guerra fría.  
Michael Chege
 | 

En 1991, los resurgentes movimientos democráticos de África  subsahariana apreciaron un sorprendente cambio en la política  de la Administración Bush. A los reformadores políticos africanos les cogió en pleno desconsuelo aún, y los envejecidos déspotas del continente se quedaron atónitos. La política exterior de Estados  Unidos hacia África se acercaba más que nunca a la manida posición de  sus críticos del Congreso. Por primera vez desde que la Administración  Kennedy apoyó el nacionalismo anticolonial africano, las multitudes que  ansiaban libertad, esta vez de la tiranía interna, aplaudieron las declaraciones del Departamento de Estado norteamericano cuando éste se fue  distanciando de los autocráticos e impopulares dirigentes que antes  apoyaba.  

El fin de la guerra fría y el desmantelamiento constante aunque  incompleto del apartheid han minado la lógica que sostenía anteriormente  las alianzas de conveniencia de Estados Unidos en el continente, tan  adversas a la difusión de las libertades civiles por África. Con todo,  aunque puede haber cambiado la actitud en Occidente, las políticas de  Estados Unidos y de sus aliados europeos hacia África no son todavía los  pilares de apoyo, que podrían ser, de unas democracias de economía de  mercado estables. Pero buena parte de ello depende también de la propia  África. Los reformadores políticos africanos deben hoy desechar las viejas  consignas ideológicas que han contribuido a mantener a sus países  aherrojados en la pobreza, la violencia interna y la represión política. El  ritmo de su propia reforma y la rapidez con que ideen nuevas políticas de  desarrollo e instituciones más en consonancia con la marcha de la historia  hacia el liberalismo económico y político contribuirán a determinar el  pleno impacto del apoyo exterior en favor del cambio….

PARA LEER EL ARTÍCULO COMPLETO