El invierno demográfico es uno de los factores que marcará la economía global en las próximas décadas. Aunque en Europa se tienda a pensar que es solo un problema local, la realidad es que el “frío” se extiende por todo el mundo. En el recuerdo quedan los años en que China ­realizaba un control de la natalidad para evitar la sobrepoblación y garantizar que, con menos niños, se acumulara mayor capital humano en cada uno. Estas políticas son cosa del pasado y países como China o India comienzan a registrar tasas de natalidad que no garantizan el reemplazo de su población.

A finales de noviembre de 2021, el ministerio de Sanidad de India confirmó que han dejado de tener suficientes hijos: su tasa de fertilidad había caído por debajo de los dos hijos por mujer, lo que implica que a largo plazo se perderá población porque no se repondrá toda…