POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 178

Lilian Tintori (en el centro), activista venezolana y esposa del líder opositor Leopoldo López, en su reunión con el primer ministro canadiense Justin Trudeau (Ottawa, 17 de mayo de 2017). GOBIERNO DE CANADÁ

Compromiso y pragmatismo con Latinoamérica

Canadá necesita una política coherente y sostenida hacia América Latina. Sin fronteras compartidas ni vínculos lingüísticos o históricos, los canadienses deben ofrecer soluciones útiles y alternativas a las de Estados Unidos o caerá en la irrelevancia en la región.
Eric Miller
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El 8 de noviembre de 2016, el contexto de la política exterior canadiense, como el de muchos países occidentales, cambió radicalmente. La elección de Donald Trump encarriló a Estados Unidos por una senda que parece diferir de la seguida desde la Segunda Guerra mundial. La Pax Americana, el contexto geopolítico en el que se ha basado la política exterior en gran parte de América, Europa y Asia durante décadas, puede desaparecer de repente. Aunque se desconoce el alcance real de este realineamiento, los países que han basado su política exterior en la participación constructiva en el sistema de alianzas estadounidense empiezan a plantearse estrategias nuevas y diferentes.

Cuando Justin Trudeau fue elegido primer ministro, en octubre de 2015, se propuso que Canadá volviese al mundo de forma activa. Había mantenido amistad estrecha con Barack Obama; se consideraban mutuamente líderes progresistas que intentaban aceptar los desafíos del mundo. Canadá tuvo un papel significativo en la materialización del Acuerdo de París sobre el clima y en la conclusión del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP). Trudeau mantuvo contactos con muchos países, entre ellos los latinoamericanos, y aumentó la participación de Canadá en las instituciones internacionales.

Y entonces llegó Trump…

Aunque Trudeau rechaza rotundamente el calificativo, muchos medios de comunicación lo definen como el “anti-Trump”. El primer ministro canadiense es un declarado feminista que acepta el libre comercio y a los refugiados sirios. The Economist reflejó este espíritu en un artículo titulado “La libertad se muda al norte”.

En América, gran parte de la atención reciente de Canadá se ha centrado en México. Después de meses agitados tras la elección de Trump, Canadá y México empezaron a coordinarse para la inminente renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (Nafta, por sus siglas en inglés). Este tratado es fundamental para la salud…

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