Autor: Timothy Garton Ash
Editorial: Barlin Libros
Fecha: 6 de marzo de 2019
Páginas: 288
Lugar: Valencia

El expediente: la historia de espionaje de Garton Ash

Política Exterior
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La apertura de los expedientes de la policía secreta de la Alemania del Este en 1992 supuso una enorme conmoción social. Sus ciudadanos, bajo la tutela de un régimen autoritario desde hacía más de cuatro décadas, pudieron acceder libremente a toda la información que éste almacenaba sobre ellos. La realidad es que parejas, familiares, vecinos y amigos se convirtieron en informadores del ministerio para la Seguridad del Estado, más conocido como la Stasi. Una verdadera tela de araña de paranoias en la que nadie se fiaba de nadie.

El expediente. Una historia personal, firmado por el historiador y periodista británico Timothy Garton Ash, narra algunos de los episodios vividos por el propio autor en aquellos años de espionaje doméstico, conocido años después tras la apertura de los expedientes. En 1978, siendo aún estudiante, Garton Ash se traslada a la ciudad de Berlín para investigar las resistencias al nazismo. Logra hacerlo gracias a un salvoconducto que le permitía moverse libremente a ambos lados del muro. Tiempo después, con la apertura de los expedientes supo que había sido espiado.

Confrontando sus recuerdos con la mirada paranoica de los agentes encargados de vigilarle, en muchos casos amigos a los que incluso recuerda con afecto, Garton Ash va dando forma a El expediente, que llega a las librerías el 6 de marzo.

En 2006, la película La vida de los otros ya mostró esta realidad en todo el mundo. Sin embargo, lo real resulta siempre más áspero y sencillo que lo que el cine quiere en muchos casos mostrarnos. Frente a la imagen de la traición, Garton Ash se pregunta en El Expediente por qué tantos miles de personas delataron e informaron sobre sus seres más cercanos y queridos. La respuesta es mucho más obvia de lo que pueda parecer: por miedo. El miedo y la búsqueda de la propia supervivencia son la clave que explica el funcionamiento de un sistema tan complejo de espionaje y delación del que se sirvió durante décadas todo un estado para coaccionar a sus ciudadanos.

Las cifras lo dejan bastante claro. De hecho, se calcula que en el momento de la desaparición de la República Democrática Alemana (RDA) en 1989, la Stasi tenía 91.000 empleados a tiempo completo y 180.000 informantes, no solo en su territorio, sino también al otro lado del Muro. Además, cuando en 1995 el gobierno alemán decidió reconstruir los archivos que se destruyeron apresuradamente con la caída del muro de Berlín encontraron que se conservaban más de 16.000 bolsas de basura repletas de documentos destruidos. Seis años después, en 2001 más de treinta archivistas trabajando a tiempo completo solo habían conseguido revisar 300 de esas bolsas.

Puede leer el primer capítulo y parte del segundo del libro descargando este archivo PDF: ‘El expediente. Una historia personal