POLÍTICA EXTERIOR  >   NÚMERO 207

Joe Biden durante el discurso pronunciado en el Castillo Real de Varsovia (26 de marzo de 2022). GETTY

Un vínculo transatlántico realista

Después de la justificada unidad ante la invasión de Ucrania, la comunidad transatlántica debe ahora atemperar sus ambiciones ideológicas con las realidades estratégicas.
Charles A. Kupchan
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La brutal invasión rusa de Ucrania es una señal aleccionadora de que la competencia militarizada entre grandes potencias ha vuelto. A consecuencia de ello, la alianza transatlántica debe revisar su gran estrategia y centrarse ahora más en la defensa de la democracia que en la expansión de la comunidad democrática.

En la larga crisis de Ucrania, la estrella polar ideológica de Occidente fue la promoción de la democracia. El compromiso de mantener las puertas de la OTAN abiertas al país constituyó una postura loable y de principios, frente a los esfuerzos de una Rusia autocrática por violar aún más la soberanía de Ucrania, hundir sus instituciones democráticas y anular sus aspiraciones de unirse a Occidente. Vladímir Putin decidió finalmente lanzar una guerra salvaje con el objetivo de volver a poner a Ucrania bajo el dominio de Moscú. Putin es el dueño de esta guerra y de la muerte y destrucción que ha producido.

La reacción muscular de Occidente –armar a Ucrania, sancionar a Rusia, reforzar el flanco oriental de la OTAN– está plenamente justificada. Sin embargo, la legítima indignación por el azote de Rusia a Ucrania no debe ocultar la necesidad de extraer sobrias lecciones de la guerra. Quizá la más importante sea que la política de poder ha vuelto, y que requiere que la ambición ideológica ceda ante las realidades estratégicas para garantizar que los propósitos de Occidente sigan estando en sintonía con sus medios. Sin duda, al combinar sus valores con su poder, Occidente ha conseguido desviar el arco de la historia de las reglas de la realpolitik y llevarlas a una mayor libertad, dignidad humana y paz. Pero ahora la comunidad transatlántica debe atemperar sus ambiciones idealistas con un mayor pragmatismo estratégico para navegar con éxito por un mundo que acaba de dar un paso atrás hacia…

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