AFKAR-IDEAS  >   NÚMERO 76

Vista de la Gran Mezquita Omari tras un bombardeo. Su biblioteca albergaba una de las colecciones más importantes de manuscritos raros de Palestina, algunos del siglo XIV./ g.d. 

El mundo al revés de los archivos: memoria, borrado y resistencia en Palestina

De las ruinas de las bibliotecas y museos de Gaza, ha surgido un nuevo campo de batalla, el digital, donde los palestinos han podido documentar y archivar los dos años de bombardeos.
Ghada Dimashk
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“¿Por qué el fuego? Porque el fuego no deja más que cenizas, y las cenizas no pueden testificar. El fuego es el cómplice perfecto del olvido”

Waciny Laredj, escritor argelino

Hay siglos ocultos en esa pregunta. El fuego siempre ha sido el arma de quienes temen la memoria o desean borrar lo que no pueden controlar. Desde el auto da fe de Cándido, de Voltaire, donde se queman libros y cuerpos para purificar al mundo de sus supuestos pecados, hasta las bibliotecas de Bagdad y Sarajevo convertidas en cenizas en nombre del orden, cada llama pretende defender la civilización, incluso mientras la devora.

Tres siglos después, ese mismo ritual continúa y ese fuego sigue ardiendo, ya no en las plazas de Lisboa, sino en los cielos de Gaza. La justificación ya no es la herejía, sino la seguridad. Las herramientas evolucionan, pero la fe en la destrucción persiste. Hoy, Gaza no arde con antorchas, sino con F-16 y silencio algorítmico. Israel ha declarado la guerra a la memoria misma. Sus huellas están por todas partes. Bibliotecas reducidas a polvo. Archivos vaporizados. Centros culturales bombardeados hasta el olvido. Archiveros y bibliotecarios, esos silenciosos custodios de la continuidad, asesinados en sus puestos. No se trata de daños colaterales. Es “libricidio”: la aniquilación deliberada y sistemática del alma intelectual y cultural de un pueblo. Acuñado a mediados del siglo XX y definido por Rebecca Knuth (2003), el término “libricidio” designa lo que el derecho internacional ya reconoce como crimen de guerra: la destrucción deliberada del patrimonio cultural como acto de borrado.

Y, sin embargo, la ley no ha logrado proteger la memoria. La Convención de La Haya de 1954 para la Protección de los Bienes Culturales en caso de Conflicto Armado tenía por objeto salvaguardar archivos, bibliotecas e instituciones culturales en…

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